Es un vino opulento y exclusivo. Se elaboró una partida limitada de 1500 botellas elegidas a partir de 6 barricas. Su enólogo, Pablo Bassin, indicó que el vino reposó un año entero en botella y eso le otorga una redondez y un equilibrio especial. La complejidad de Valle de Uco y su diversidad de terroirs se conjuga para dar nacimiento a un ejemplar emblemático: el vigor de los suelos se encuentra presente.
Mosquita Muerta Wines hasta ahora se caracterizaba por tener un portfolio de etiquetas únicamente de blends. Ahora, MALCRIADO, viene a romper con la propia dinámica creada por ellos. Malcriado sin dudas será algo PISPI y por momentos será SAPO DE OTRO POZO.
